En los procesos judiciales se requieren varios profesionales del derecho, entre abogados y procuradores, dos roles con poderes y funciones diferentes e incompatibles, pero que no siempre saben distinguirlos. Repasamos la diferencia entre un procurador y un abogado.
Funciones de los abogados
Un abogado es un profesional del derecho que se encarga de defender a una persona física o jurídica para defender sus derechos/intereses frente a otras personas, entidades públicas o privadas. Son los encargados de desarrollar estrategias defensivas teniendo en cuenta los intereses que representan, asesorándoles sobre las posibles opciones y resolviendo cuestiones jurídicas.
La función del abogado va más allá del ámbito judicial, es un profesional polivalente que también se dedica a:
- Asesoramiento en negocios inmobiliarios, venta de viviendas, alquileres de casas o fincas…
- Redacción de contratos privados o públicos de muy diversa índole: obras, obra, compraventa, etc.
- Preparar recursos en procedimientos administrativos, tales como requisiciones obligatorias.
- Negociaciones sobre derechos laborales, invalidez, jubilación, abogados de despidos, etc.
- Redacción de testamentos, divisiones hereditarias y procedimientos judiciales hereditarios.
- Áreas de práctica: registro de sociedades, concurso de acreedores, asuntos jurídicos entre sociedades, reorganización de accionistas, etc.
- En caso de accidente, puede reclamar una indemnización a la compañía de seguros.
- Gestión de la propiedad industrial e intelectual.
Para poder ejercer como abogado es necesario ser licenciado o licenciado en derecho y haber realizado un posgrado o máster en determinadas especialidades (laboral, fiscal, administración…). Si tiene un título universitario, debe completar sus estudios y obtener una maestría formal para ingresar a la profesión de abogado y aprobar el examen de admisión del Departamento de Justicia. En todos los casos, deberá estar inscrito en el Colegio Oficial de Abogados.
Funciones de los procuradores
Los procuradores son licenciados en derecho, especialistas en procedimientos procesales, cuya función está relacionada con la gestión para simplificar los procedimientos judiciales. Por eso es el encargado de recibir las comunicaciones del juzgado para pasarlas a los abogados y viceversa.
La función principal de un procurador es representar a una persona física o jurídica en los tribunales; actuar como puente entre los ciudadanos y el sistema judicial.
La función principal de los procuradores es representar a las personas físicas o jurídicas que acudan a los Tribunales; hacer de puente entre la ciudadanía y el sistema judicial. Su firma en los escritos que presente en dependencias judiciales equivale a la rúbrica de la parte que lo designe. Para ello la persona a la que representa debe otorgarle un poder de representación ante un notario o un secretario judicial, lo que se denomina apud acta.
A diferencia de los abogados, los procuradores no pueden cobrar honorarios, ya que sus honorarios se rigen por el Real Decreto 1373/2003, de 7 de noviembre, por el que se establecen las retribuciones máximas y mínimas. Estas tarifas permiten una ganancia prescrita del 12% por servicio.
Diferencias entre abogados y procuradores
En general, y muy esquemáticamente, la principal diferencia entre un abogado y un abogado es que el primero asesora y defiende a los clientes, mientras que el segundo los representa. Son dos profesiones incompatibles cuyas funciones no son intercambiables (un abogado no puede sustituir a un abogado y viceversa).
- Defensa. Los abogados son los encargados de defender a sus clientes, tarea que los abogados nunca pueden emprender.
- Interrogatorio. Las preguntas formuladas a los testigos ya los intervinientes en el proceso judicial son siempre formuladas por los abogados, así como las conclusiones finales.
- Asesoramiento. También recae sobre los abogados. De esta forma, se encargarán de comprender los detalles de cada caso, asesorando a los clientes en asuntos legales y judiciales, enfocándose en las estrategias de defensa y velando por los intereses de los clientes.
La representación es la principal función de los procuradores.
- Representación. Esta es la principal responsabilidad de un procurador. Como experto en derecho procesal, representa legalmente a ciudadanos en procesos judiciales después de otorgarle un poder notarial.
- Notificaciones y documentos judiciales. El procurador siempre está a cargo ya que administra los documentos, maneja las transacciones y el poder notarial. Es un canal de comunicación entre el juzgado y los abogados que puede agilizar trámites y actuaciones judiciales. Esto incluye la presentación de escritos elaborados por abogados a los órganos judiciales pertinentes.
- Plazos. La gestión de los plazos y el control de los mismos corresponde a los procuradores, quienes deben velar por su cumplimiento e informar a los abogados. Si hay un error, se avisará al abogado, juzgado o cliente para que lo corrija.
Fuente de referencia: Diferenciapedia.com