Barcelona Existen varios tipos de estándares que hacen referencia a la excelencia en las distintas actividades que componen el servicio de una empresa de catering. Independientemente, la regulación de calidad es voluntaria, pero aceptarla significa que la empresa se compromete a proporcionar el mejor producto posible a sus clientes.
Las normas ISO cubren diferentes aspectos de la producción y el comercio. Provienen de la necesidad de definir uniformemente estándares para la calidad de los objetos o servicios a nivel internacional. El organismo encargado de crear este estándar a nivel mundial es la Organización Internacional de Normalización (International Organization for Standardization en sus siglas en inglés), que colabora con la oficina de normalización de cada país (AENOR en España).
La ISO 9000 aborda diferentes aspectos de la gestión de la calidad dentro de una empresa, independientemente de su tamaño, para aumentar la competitividad. ISO 14000 es una norma de calidad ambiental. 28.000 normas del grupo regulan la seguridad de toda la cadena de suministro (personas, bienes, infraestructura y equipos). Las empresas de catering pueden presentar estas certificaciones más genéricas.
Hay otras más específicas como las ISO 22000 que regulan la seguridad alimentaria en todo el proceso de producción y manipulación de los alimentos. El BRC asegura que los proveedores de alimentos garantizan su salubridad durante su almacenamiento, empaquetado y distribución, mientras el IFS se aplica a la logística e importación de comida.
En todos estos casos, lo que se busca es que, en un mundo globalizado, las pequeñas y medianas empresas también puedan acceder a los mercados internacionales. Las empresas de restauración que reciben estos certificados de calidad garantizan que la higiene, inspección y control de los alimentos que elaboran está en las mejores condiciones posibles.
¿Qué normas sanitarias se aplican en el sector del catering?
Según el Real Decreto 191/2011, de 18 de febrero, toda empresa de restauración debe estar inscrita en el Registro General Sanitario de Empresas Alimentarias y Alimentos (RGSEAA), que regula el Registro General Sanitario de Empresas Alimentarias y Alimentos.
En 2002, el establecimiento de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) para brindar asesoramiento científico sobre los riesgos para la salud asociados con el sector alimentario hizo posible establecer los procedimientos y estándares necesarios para la seguridad alimentaria.
Existen diferentes directrices europeas:
- Reglamento (CE) nº 178/2002
- Reglamento (CE) nº 852/2004: regula la higiene de los productos alimenticios
- Reglamento (CE) nº 853/2004: productos de procedencia animal
Según estas directivas, las empresas europeas que prestan servicios de manipulación, producción, procesado y distribución de alimentos deben cumplir protocolos de seguridad para realizar su trabajo sin poner en riesgo la salud de las personas.
Por tanto, el Decreto español permite definir el marco de actuación de aquellas empresas españolas dedicadas a la industria alimentaria en sus distintas variantes, para lo que establece la obligación de dichas empresas de disponer de un número de registro, acreditando que disponen de las instalaciones necesarias para llevar a cabo desarrollar sus actividades profesionales de forma segura.
El decreto se aplica a los siguientes tipos de empresas: empresas especializadas en la producción, procesamiento, procesamiento y/o envasado de alimentos y alimentos; empresas especializadas en el almacenamiento y/o distribución de alimentos y alimentos; empresas importadoras de productos de países no pertenecientes a la UE.
Por tanto, estas empresas, incluidas las empresas de restauración, deben estar registradas en la Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición, especializada en la evaluación y control de riesgos alimentarios. Corresponde a la comunidad autónoma expedir las citadas autorizaciones para que las actividades se desarrollen de conformidad con lo dispuesto en la ley.
Una empresa de catering de confianza, La Frolita, con una gran implicación en el sector desde hace diez años, es una empresa especializada en ofrecer servicios de catering originales para diversos eventos y ocasiones, cuya originalidad, creatividad y exquisitez hacen felices a los asistentes.
